Aunque muchos están con la cuenta atrás, otros afortunados ya se encuentran disfrutando de un merecido, o no, descanso en lugares cerca del agua. Y es de nuestro comportamiento en playas y piscinas de lo que te quiero hablar hoy.
Estoy viendo a tanta gente mal vestida y mal portada, interfiriendo en el espacio vital de los que se encuentran en el mismo lugar, que quiero lanzar una encarecida petición a bañistas.
Pretender rodearnos de apolos y venus en la playa es imposible (a no ser que te encuentres en algún chiringuito de Ibiza donde inexplicablemente toda la clientela parece estar sacada de una revista de moda). Pero a lo que iba ¿no estás cansado o cansada de tan poco gusto playero? Carnes rebosantes embutidas en trajes de baño poco favorecedores, top less con senos “pimiento frito”, barrigas enormes cubiertas de pelo, al igual que hombros y espaldas,… aderezado con shorts y camisetas tipo “Talleres Paco”.
Parece que con el relax veraniego todo vale, modelitos imposibles, el último grito en tiendas low cost sienten como sienten, chanclas y bañador a todas horas y en todo lugar, ropa interior a la vista,… No me voy a poner a negar el pan a gente poco agraciada, si me conoces un poco sabes que soy firme partidaria de que todo el mundo puede resultar atractivo eligiendo con cuidado su vestimenta y comportamiento. Ya decía el diseñador Tom Ford “El modo en el que vistes demuestra la importancia que le das a los demás”, y es ahí donde quiero insistir.
Afortunadamente con la democratización de la moda, no es difícil adquirir prendas bonitas, de tendencia y sobre todo que favorezcan a precios más que razonables.
No confundamos relax con descuido, el tipo de ropa que eliges transmite quien eres.
Pero vayamos un poco más allá, llegar a tus escasos metros cuadrados de arena avasallando a los que tienes alrededor, plantar la sombrilla en las mismas narices de quien está allí desde hace rato sin meterse con nadie, poner la música a todo trapo sin importarte si les gusta o no al resto de bañistas, sacudir la toalla rebozando al vecino, dejar que los niños molesten con sus gritos y numerosos juguetes, ahumar con el cigarrillo al de al lado y después apagarlo directamente en la arena,… Obviamente no es de ser muy considerados.
Me vas a llamar pesada, pero comportarse sin importarte cómo se siente la gente que te rodea solo demuestra que eres una persona mal educada y poco cortés. No te quejes cuando hagan lo mismo contigo.
Te invito a que reflexiones sobre cómo nos desenvolvemos en lugares públicos, que abuses, una vez más de la discreción, que si vas a hacer algo que supones invade el espacio del vecino, preguntes primero (poquísimas veces te van a decir que no pero quedas genial), sonríe, saluda al llegar y al irte, ofrécete a vigilar el bolso cuando se metan en el agua,… insisto, compórtate con tus vecinos de toalla o hamaca igual que te gustaría que se comportaran contigo, harás de playas y piscinas lugares más agradables de estar ¿y no es eso lo que todos queremos? Pasar unas tranquilas y agradables vacaciones.
Si crees que te puedo ayudar a encontrar esos estilismos con los que te sentirás mejor, a mejorar tus capacidades de comunicación o profundizar en el mundo del protocolo no dudes en ponerte en contacto conmigo. Seguro nos entendemos.
–Contacto Elena Valor Comunicación-
Disfruta del calor, las terrazas y de este verano que promete. ¡Nos vemos pronto!